“¿No consigues mejorar tu español? Así puedes superar el nivel intermedio y pasar al avanzado”
Transcripción del video con la lectura del EJERCICIO de ESCUCHA de la Serie 1 del PLAN DE MEJORA dirigido a estudiantes INTERMEDIOS y AVANZADOS de ESPAÑOL.
Hola, soy Norma, de Kaizen Spanish. En este video te traigo un ejercicio de ESCUCHA dirigido a estudiantes intermedios y avanzados de español.
Este es el primer video de la Serie #1 del plan de mejora continua, basada en el Método Kaizen. Si quieres conocer en detalle de qué se trata este plan dirigido a estudiantes intermedios y avanzados, puedes hacer clic en este video y regresar.
El artículo de la serie 1 se titula: “¿No consigues mejorar tu español? Así puedes superar el nivel intermedio y pasar al avanzado”. Escucharás mi lectura para que puedas ejercitar tu comprensión auditiva y puedes leer el texto mientras yo leo.
Recuerda que el plan de mejora continua incluye siete ejercicios y así que suscríbete al canal de Kaizen Spanish, activa las notificaciones y si quieres puedes pautar una clase conversacional conmigo. En la descripción te dejo el enlace.
Ahora sí, comencemos con la lectura.
¿No consigues mejorar tu español? Así puedes superar el nivel intermedio y pasar al avanzado
El objetivo es manejar el idioma con precisión y naturalidad para comunicar ideas más complejas, pero de forma más sencilla
Para quien se haya propuesto1 mejorar su español y superar (por fin) el nivel intermedio, los expertos señalan tres claves: dos evidentes —esfuerzo y tiempo— y otra mucho más abstracta, que consiste en ser consciente de lo que implica2 hablar español de forma avanzada.
Se trata de alcanzar un nivel de soltura3 y una amplitud de rango en cuanto a los temas y a los contextos en los que uno puede operar. Es una combinación de soltura, rango, formalidad, control y exactitud.
El objetivo es comunicar ideas más complejas, pero hacerlo de forma más sencilla. O, en la terminología más técnica, pasar de los niveles B a un C. Así es como delimita4 la frontera el Marco Común Europeo de Referencia, que es la herramienta básica que define los distintos niveles en el aprendizaje de un idioma extranjero.
De esta manera, quien tenga un español B2 debe ser capaz, por ejemplo, de hablar de temas diversos, tanto concretos como abstractos, justificar5 opiniones y mantener una conversación con un nativo. Para escalar6 hasta un C1 o incluso a un C2, se exige un nivel de sofisticación mucho más alto.
Es un cambio cualitativo y de mentalidad. Con un B2 puedes manejarte en todas las situaciones, mejor o peor, pero eres capaz. En C1 ya no se trata solo de ese aspecto pragmático de poder comunicarte, sino de hacerlo mejor.
El primer concepto básico para entender en qué consiste este cambio de mentalidad respecto al idioma es el de la precisión. Lo que se exige es ser consciente, por ejemplo, de que decir "estoy cansado" no es lo mismo que asegurar "estoy exhausto", aunque ambas opciones sean correctas. Sabes exactamente la palabra que tienes que usar en cada situación y en cada momento.
Se trata de aprender a dominar los diferentes registros7 del idioma y de mantener esa precisión en cualquier situación, tanto si estás haciendo una broma8 en una charla informal con amigos como si lo que necesitas es redactar un informe para entregar en el trabajo.
En los niveles más bajos (A1, A2, B1), los alumnos se mueven en un círculo mucho más estrecho9 que se suele limitar al ámbito personal y a un registro informal. Conforme se avanza hacia el dominio del idioma, lo que se exige es ampliar ese abanico10.
No basta, sin embargo, con ser exacto. Esa precisión debe fluir11 con naturalidad. Las pausas que uno hace cuando habla en español ya no deben ser para pensar en cómo construir12 una frase o intentar recordar esa palabra que necesitas, sino para elaborar ideas más complejas.
A partir del B2, se da por hecho que ya sabes construir el lenguaje sin demasiado esfuerzo. La carga cognitiva ahora está en buscar las ideas. La pregunta no es cómo decir algo, sino qué decir. También hay que aprender a leer entre líneas, a manejar los dobles sentidos del lenguaje, a captar los matices13 en lo que los otros cuentan14 y a saber utilizarlos cuando hablamos nosotros.
Para conseguir15 esa fluidez es imprescindible16 ampliar el vocabulario. Un alumno de B2 puede conocer entre 5.000 y 10.000 palabras, pero en C1 debes saber más de 10.000. Ese es, sin embargo, uno de los principales obstáculos en el camino hacia un dominio avanzado del español.
Los alumnos parten de una base, la del B2, que ya les permite desenvolverse17 prácticamente en cualquier situación. Una especie de zona de confort en la que cuesta trabajar la motivación para ir más allá. Sobre todo por lo complicado que resulta incorporar nuevas palabras y expresiones, más precisas pero de un uso más esporádico, y además hacerlo de tal forma que se puedan utilizar con naturalidad cuando la situación lo requiera.
El gran reto de pasar del B2 al C1 es darte cuenta de que necesitas esas palabras. En muchos casos las tienes en el vocabulario pasivo, las reconoces o te suenan, pero no las utilizas. Tienes que encontrarte en situaciones en las que te fuerces18 a emplearlas. No necesariamente en el día a día, pues si habláramos siempre en C1 o C2 seríamos insufribles19, pero sí debes tener ese nuevo registro en la recámara20 para cuando lo necesites.
Los expertos aseguran que el salto a un nivel avanzado no es tal, sino más bien una continuidad. Y trazar21 la frontera para saber cuándo uno ha llegado al territorio avanzado es prácticamente imposible.
Lo más difícil para el alumno es percibir que lo está logrando. Es necesaria una consciencia propia del estudiante para que se dé cuenta de que usa un vocabulario más amplio, que entiende textos sin necesidad de ir al diccionario.
El proceso es, sin embargo, muy gradual. Y en los niveles avanzados, no es suficiente con machacar22 la gramática o aprender más vocabulario. Hace falta trabajar otras destrezas, que muchas veces se escapan a lo meramente lingüístico. Entran en juego otras habilidades: argumentativas, expositivas, de pensamiento crítico... que a veces se tienen en la lengua materna y otras no.
¿Cuánto tiempo hace falta para superar23 el nivel intermedio y comenzar a manejar el español de forma avanzada? Los expertos aseguran que es complicado cuantificar, pues depende de lo que uno aproveche las clases, pero también del contacto con el idioma que se tenga fuera del aula. El consenso está, sin embargo, en unas 200 horas de dedicación si se parte de un B2, el equivalente a un curso académico.
Si quieres la transcripción completa del artículo, suscríbete al boletín de Kaizen Spanish en Substack, así tendrás acceso a los textos, a las transcripciones completas de los videos de la serie conforme los vaya publicando. En la descripción de este video te dejo el enlace.
Espero que hayas entendido la mayor parte de la lectura. Pero, ¿escuchaste palabras que no conoces? En el siguiente video, dedicado a vocabulario, te explicaré el significado de 12 palabras que estaban en la lectura y que no son tan comunes.
Y si sientes que debes ejercitar tu comprensión auditiva, en esta lista de reproducción vas a encontrar varios videos con ejercicios. Recuerda, si quieres mejorar tu español ¡toma acción!
Proponer (verbo): hacer propósito de ejecutar algo.
Implicar (verbo): significar algo.
Soltura: agilidad y facilidad para hacer algo.
Delimitar (verbo): fijar con precisión los límites.
Justificar (verbo): Probar con razones convincentes.
Escalar: Subir a un nivel más alto.
Registro: modo de expresarse que se adopta en función de las circunstancias
Broma: Chanza, burla.
Estrecho: Ajustado, apretado.
Abanico: Serie de diversas cosas de la misma clase para elegir entre ellas.
Fluir (verbo): Brotar fácilmente de la mente o de la boca.
Construir (verbo): Hacer utilizando los elementos adecuados.
Matiz: Rasgo poco perceptible que da un carácter determinado.
Contar (verbo): Narrar, relatar.
Conseguir (verbo): Obtener o lograr lo que se desea.
Imprescindible: Necesario, obligatorio.
Desenvolver (verbo): actuar con habilidad.
Forzar (verbo): obligar a que algo se haga.
Insufrible: difícil de soportar o aguantar.
Recámara: lugar donde se guarda o reserva algo.
Trazar (verbo): delinear o dibujar una línea.
Machacar (verbo): Golpear algo para deformarlo.
Superar (verbo): Vencer obstáculos o dificultades.